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Revelaciones 6


Miércoles, 20 de septiembre de 1995… rezo… (13:14) a (13:31)


+ Escribe.  

Yo.- ¿No podría hacerlo más tarde? Tu Espíritu ya me haría recordar lo que dices. 

+ (- Con autoridad dulce me dice:) Escribe. 

Yo.- (Rezo la oración de la luz) 

+ Lix, mi más amada hija, (- se trata de mi amiga del alma, Lix) quiero y te ordeno, Yo, tu Dios y Señor, que olvides ahora y para siempre, tu doloroso pasado: ¡No quiero que pienses ni hables más de él! 

Quiero curar tus heridas, mi más amada hija; piensa en mi Madre Santísima, Ella no se sumerge en el pasado. 
Tu esposo te ama, y quiero que, a través de ti, venga a Mí. Yo lo conozco bien, y me ama. No dudes, y haz lo que te pido. Que tus hijos olviden lo pasado, y todos le améis por Mí. 
Yo pongo un nuevo día en vuestra familia. Mi amado hijo Víctor, me lo pide constantemente, y mi Madre se une a él, y no voy a negarles nada, porque éste también es el deseo del Padre, el Mío y el del Espíritu Santo. 
¡No hables nunca más del pasado! Si te invade su pensamiento, reza un padrenuestro. 
Yo, amada hija de mi Inmaculado Corazón, te lo pido por mi amor. Serás feliz, muy feliz, y los nietos saltarán en tus rodillas. 
Olvídate de todo y acuérdate sólo de amar. Que tus hijos hagan lo mismo, y mi voluntad se cumplirá. Os amo a todos y os bendigo. 

Yo.- Pero Señor, Dios Mío, ¿De qué sirve lo que he escrito, si no puedo hablar con Lix?, ella me lo ha pedido. 

+ Tú, hija mía, lo has escrito y esa era mi voluntad. Por lo demás, Yo sé lo que hago. (- Y sonríe)