Saltar al contenido

Revelaciones 57

Domingo, 17 de Mayo de 1996… Rezo… (6:14 h. mañana) a (6:31 h. mañana).

Yo.- Amor de los Lluvia: ¿Qué deseas, Dios amado y Señor Nuestro?

+ Ante todo, amados de Dios, del Dios, Uno y Trino, por ser tres Personas en un Dios mismo, deseo decirle a Deber: ¡Felicidades, hijita linda, preciosa niña! Sigue, sigue leyendo y estudiando el catecismo, allí se resumen mis enseñanzas, mis Santas enseñanzas y mi voluntad. Te amo, Deber. Hoy que celebras tu santo, me pide éste, te bendiga, y así lo hago, bonita mía. Y Mamá y Yo, Jesús, deseamos que pidas algo, que te lo concederé Yo, Dios. Bésame en la figura del Jesusito, y llenaré tu corazón con mi amor y el de Mamá.

Deseas saber de qué color son nuestros vestidos que llevamos en el Cielo, Mamá y Yo, Dios; y te digo, linda Deber, que son como el oro, el oro de tu tesoro, del tesoro de tu amor. ¡Gracias por amarnos tanto, pequeña flor! Sí, te llamo flor, porque esparces mi perfume, el perfume del amor y fe en Mí, ¡en Dios!

También deseas saber, si san José llevaba barba cuando vivía en la tierra, y te lo digo Yo, Dios: Sí, llevaba barba mi padre José, pero era una barba que no pinchaba, por lo menos a Mí, a Jesús; las tantas y tantas veces que le besé, no me pinchó jamás. (Y sonríe Dios, con dulzura de corazón).

Que seas muy feliz, niña Deber; a Mamá y a Mí, nos llenas de gozo y dicha.

Primavera, sé más cariñosa con Deber: te necesita, y si se muestra “pesada”, es porque necesita más que otros, ser amada. Dale tu amor, y sacia su corazón; te lo pido Yo, Dios…

Y deseo decirte a ti, mi patriarca Fuerza: Haz como Yo, Dios, que sabiendo el mal que cobijan en el interior, algunas personas, me abstengo de decírselo. Y si no se lo digo, es para hacerles salir el bien que hay dentro de sí.

¡No digas la verdad que sabes de tus hermanos de sangre!

¡Abstente!

Deseo Yo, Dios, que, con los años, me los rindas a Mí.

Y que gracias a tu amor, que puede que no merezcan, tengan su vida eterna en el Cielo.

¿Lo harás así, verdad, ungido de Dios?