Saltar al contenido

Revelaciones 15

Viernes, 12 de abril de 1.996 –   Rezo…      13:36 h.

Yo.- Amado Dios, Dios Bueno y Justo. ¿Qué deseas de nosotros hoy?

+ Amados y benditos míos, vuestro Dios desea vuestra amistad, vuestro amor y confianza; confiad en Mí, ¡no temáis a Dios!; aunque Satán o la vida os dañe, confiad en Mí, en Jesús.

¡No tengáis miedo!, vuestro miedo va contra vosotros mismos y os destroza la fe y la esperanza; esperad en Dios, que vengo, vengo rápido a daros mi protección, vengo justo el momento preciso, ni antes ni después.

Acudo cuando la prueba está a punto de superar vuestras fuerzas; siempre estoy pendiente de vosotros, siempre estáis bajo mis ojos.

Deseo que cuando estéis pasando una o varias pruebas, tengáis la confianza y la certeza de que si no he acudido aún a vosotros, es que podéis soportar lo que os parece insoportable.

Yo, Dios, acudo cuando ya no podríais soportarlo, esta es la verdad, y si miráis vuestro pasado y vuestras pasadas pruebas, sabréis que no miento; sufristeis mucho, pero resististeis hasta que Yo, Jesús, Dios, vine y di un giro a vuestra vida.

Mientras no perdáis la gracia, mientras no me abandonéis, Yo, Dios, no os abandono, acudo en el momento preciso.

Santa María, está pendiente de vosotros, y si Yo no os recordara, Ella haría que Dios, Yo, os recordara; es vuestra Madre, fiel y bondadosa, y está pendiente de todos los detalles, como una buena y fiel esposa.

Acudid a María, me agrada oír la voz tan amada de vuestra Abogada, defendiendo vuestros intereses; me plazco en escuchar, en ver su bondad.

Me enternece el corazón, el amor que veo siente por vosotros, y es su amor, el que enamora a Dios.

Enamoraos de María y vivid para servirla. ¿No sabéis lo que quiere? Os lo dirá:

*Amados míos: amad y servid a Dios, a la Iglesia y al Santo Padre. Y dejad que yo, María, os ame y os cuide. Eso es lo que quiero, quiero vuestro amor, vuestro amor para mi Hijo Dios.

13:56 h.