+ Hijos míos, rezad esta oración que os diré para mi hija y para todos los hijos, a quienes, por mediación vuestra, se obrarán milagros, sean milagros físicos o para el alma.
La oración que Yo, Dios, os doy, es la siguiente:
(…) + Un poquito del agua de Lourdes, (…) y rezáis esta oración:
“Por el amor y misericordia de Dios, que se añada a los méritos de esta agua milagrosa de Lourdes, los deseos del Dios, Uno y Trino.
Por el poder y la voluntad de Dios, del Dios que es Padre, Hijo y Espíritu Santo, te pido por el cuerpo y el alma de… (decís el nombre, o nombres, o denominaciones), para que se obre Tu milagro, por Tu amor, Tu misericordia e infinito poder. Ten, Dios nuestro, compasión de él/ella/ellos. Te lo pedimos por la muerte y pasión de Dios Hijo, por intercesión de María santísima, san José y todos los Santos y Ángeles. Y por nuestro amor a Ti y nuestra fe en Ti, Dios bueno y fiel. Amén, amén, amén”.
(…) + Y, con esta oración, salida de vuestro corazón, Mi milagro, el milagro de Dios, será cumplido. Lo sello, Yo, Dios, por Mi poder y autoridad.
Pero antes, confesaos de todos vuestros pecados, ante un sacerdote católico, e id a comulgar. (…)
Oración sacada de las Revelaciones 65, del libro 2 titulado; AMANDO AL AMOR.